Nueva investigación revela que las personas desordenadas son en realidad genios

Nueva investigación revela que las personas desordenadas son en realidad genios0shares

Seguramente habrás oído que varios genios han sido tildados en su infancia o juventud de lentos o perezosos por sus padres y sus maestros, sin embargo, el tiempo se encargó de mostrar al mundo que en realidad eran personas con un coeficiente intelectual tan alto, que pasaban sus días pensando en cosas más profundas que ordenar y limpiar sus habitaciones

A menudo las personas son ridiculizadas por ser desordenadas, creyéndolas poco productivas, flojas o poco inteligentes, pero un nuevo estudio indica que estas suposiciones no son necesariamente correctas.

La realidad es que el desorden está lejos de ser algo malo, y en ocasiones puede ser un signo de inteligencia y eficiencia para muchos. Para los investigadores, vivir o trabajar en un caos organizado es algo positivo y han puesto como ejemplo a Albert Einstein, quien -según dicen- era en extremo desordenado, como también lo eran Steve Jobs, Thomas A. Edison, Mark Twain y, al parecer, el creador de Facebook Mark Zuckerberg.

1. Todos valoran la pulcritud

Para entender porqué las personas creen que la organización es necesaria para la inteligencia, debemos entender que cuando somos niños se nos enseña a ser ordenados en nuestros quehaceres y en nuestras habitaciones.

El desorden no es negociable 

Por lo general, para salir a jugar tus padres te exigían que dejaras tu habitación ordenada y los cuadernos debían estar impecables, esto lo hemos transmitido a nuestros hijos, y de esta manera el más mínimo desorden está mal visto.

Mucho orden puede ser contraproducente 

Estar demasiado obsesionado con un estilo de vida ordenado puede resultar en más desorden, y debemos tomar en cuenta que no importa cuánto trabajemos para mantener un espacio organizado, siempre se puede volver a desorganizar.

El desorden puede incrementar la productividad

Estudios han demostrado que cuando a los miembros del personal se les permite ser un poco desordenadas, su productividad se incrementa hasta un 30% más que en entornos completamente limpios y organizados.

No llegar a los extremos 

Por supuesto, no se puede ir a los extremos, como vivir con poca higiene o no limpiar nunca. La idea es que haya un equilibrio y en el espectro de ese equilibrio, no hay nada de malo en ser un poco más desordenado de lo socialmente permitido.

2. El desorden puede inspirar la creatividad y aumentar la inspiración

Muchos escritores eran desordenados, entre ellos están Mark Twain, Roald Dahl y J. K. Rowling. De acuerdo a los estudios, tener una mesa de trabajo un tanto desorganizada es ideal para promover niveles más altos de creatividad e innovación.

Desorden e innovación

Según un estudio realizado en 2013 por la Universidad de Minnesota, los espacios de trabajo desordenados pueden aumentar considerablemente el pensamiento innovador positivo. Mientras que los espacios muy ordenados tienden a dar como resultado un pensamiento convencional.

Atreverse a ser diferente 

Ser desordenado puede ser una manifestación de ir en contra de las normas convencionales y atreverse a ser diferente. Probablemente esta sea la razón por la que tantos pensadores únicos han sido desordenados, generando ideas innovadoras, espontáneas y valientes.

3. Las personas desordenadas están más enfocadas en su objetivo

Para la mayoría de las personas un entorno desordenado puede reducir su pensamiento positivo y su capacidad de concentración, aparte de estresarlos y hacerlos ineficientes. Mientras que las personas desordenadas son capaces de mantener mejor su enfoque.

Capacidad de ignorar las distracciones e inspiración en lo no convencional

Los escritorios ligeramente caóticos representan la capacidad para mantenerse tranquilos  e ignorar las distracciones, promoviendo una mayor eficiencia en general. La falta de orden es solo un síntoma de su alta tolerancia a la distracción.

4. La gente desordenada tiene sus ojos en el panorama general

Poder ver el panorama más amplio es lo que le permite a una persona crear nuevas y sorprendentes ideas para encontrar soluciones adecuadas a los  problemas. Esta habilidad permite que las personas tomen decisiones más rápidas, en lugar de obsesionarse con cosas que no importarán a largo plazo.

No apuntar a la perfección 

Cuando no buscas la perfección, tienes más posibilidades de echar un vistazo al panorama general.

Adaptabilidad

Los individuos desordenados tienden a adaptarse mejor a las nuevas situaciones. No se detienen en las pequeñas cosas y timan acciones rápidamente basándose en el macro.

5. Las personas desordenadas tienen la idea correcta

El físico Adam Frank, afirma que el desorden es el estado más natural del universo, por lo que las personas desordenadas tienen la idea correcta.

No insistas

Como ya lo mencionamos, no importa cuántas veces limpies un área de trabajo, solo volverá a ensuciarse. Si bien la limpieza ligera general es importante para la  higiene, ir al extremo en pulcritud es malo para la productividad.

Aprovechar el tiempo

Tomarse el tiempo para limpiar un área de trabajo puede consumir horas de tiempo valioso. Este tiempo podría utilizarse trabajando en tareas más importantes. Las personas desordenadas no se distraen limpiando

La limpieza como excusa

La limpieza puede ser una forma de postergación y dado que el desorden siempre viene después del orden, no pasará mucho tiempo antes de que esta demora comience nuevamente.

6.  Espacios desorganizados e inteligencia

Una mente no organizada puede ser indicativa de inteligencia, y de una mayor probabilidad de construir sobre la inteligencia existente.

Los genios procesan las cosas creativamente

Los procesos de pensamiento de los genios no van en línea recta. Los estudios han demostrado que tienden a pensar con el lado derecho de sus cerebros, que es el centro del pensamiento creativo. Debido a esto, las mentes brillantes tienden a dibujar ideas únicas y a pensar fuera de la caja.

Siempre quieren aprender   

Las personas con un cerebro desorganizado no se contentan con hacer una sola cosa, quieren adquirir nuevas habilidades para satisfacer los deseos de su cerebro, por eso siempre están aprendiendo y desarrollando nuevos intereses.

En conclusión 

Ser desordenado no es un signo de poca inteligencia y, si el desorden te funciona, no hay nada de malo en vivir con un poco de caos. Si estar en medio de la desorden te estresa, limpia, pero si no te molesta y te sientes bien, ¡sigue adelante!

¿Estas de acuerdo con este estudio? Déjanos tus comentarios y comparte con tus amigos para que no se preocupen por ordenar todo 

DEJANOS SABEN TU OPINION
TE LO RECOMENDAMOS
TU PUEDE INTERESAR